
El rio Vinalopó es un río de la Península Ibérica que atraviesa de norte a sur la provincia de Alicante, y con sus 81 km es el río autóctono más importante de la misma.

Nace en la Sierra de Mariola, entre Bocairente y Bañeres. Da nombre a las tres principales comarcas que atraviesa (Alto, Medio y Bajo Vinalopó), cruzando a lo largo de su recorrido los municipios de Bocairente, Bañeres, Benejama, Campo de Mirra, Cañada,Villena, Sax, Elda, Monóvar, Novelda, , Monforte del Cid, Elche y Santa Pola.
A lo largo del curso del Vinalopó existen tres parques naturales; Sierra de Mariola, Salinas de Santa Pola y El Hondo de Elche. Existen además otros parajes naturales de especial interés, como la laguna y sierra de Salinas o los pantanos de Elda y Elche.
El valle del Vinalopó ha sido históricamente una importante vía de acceso natural (por él accedía la Vía Heráclea al interior de la Meseta) y es todavía centro de una importante red de comunicaciones, con la autovía A-31 y el ferrocarril de Alicante a Madrid y Valencia. Ya desde finales del siglo XIX las facilidades naturales de valle, unidas al ferrocarril Madrid-Alicante (inaugurado en 1858) promovieron el desarrollo de la agricultura comercial (vino, almendra, azafrán, barrilla, etc.) y la aparición de industrias artesanales de alpargatas, esteras, jabón, turrones, etc.
El Vinalopó recibe varias aportaciones a su caudal a lo largo de su curso. Cuenta con dos afluentes: el Marchal, un pequeño río de corto recorrido que desemboca en el Vinalopó dentro del municipio de Bañeres y el Tarafa, que pasa por Aspe. Además, recibe las aportaciones de las numerosas ramblas que realizan una función de drenaje en las sierras del interior, sobre todo a la altura de Elda-Petrel (ramblas de Pusa, Melva, Sapo y Bateig). A la altura de la Colonia de Santa Eulalia, desemboca también en el río la Acequia del Rey, que aporta aguas salinas de la antigua laguna de Villena, así como aguas residuales de esta ciudad.
La utilización de sus aguas para el regadío en el curso alto, la falta de lluvias en la zona, así como las aportaciones de aguas residuales e industriales, hacen que el río tenga un caudal escaso, muy salino y contaminado.
Carece de desembocadura derramando sus aguas en la pedanía «El Derramador» de Elche.